Jorge Célico (der.), con su cuerpo técnico durante el cotejo entre Ecuador y Colombia en New Jersey, Estados Unidos, el 19 de noviembre del 2019. Foto: API
Los problemas no cesan entorno a la Selección. A la demorada decisión de designar al reemplazante de Hernán Darío Gómez, despedido del equipo el 1 de agosto del 2019, pudiera sumarse la salida de Jorge Célico, el director de las divisiones formativas del equipo.
Célico cumplió su último encargo al frente de la Selección mayor, en la noche del martes 19 de noviembre, cuando Ecuador perdió 1-0 ante Colombia en Nueva Jersey. En la rueda de prensa posterior al juego, una periodista le comentó a Célico que, antes de haber ingresado al salón, Francisco Egas, presidente de la Ecuafútbol, le confirmó que él no sería el nuevo técnico de la Selección.
El lenguaje verbal de Célico lo delató. Se encogió de hombros como quien recibe una mala noticia . “Tengo que ser muy sincero. He hecho muchos esfuerzos. Seguramente, tendré que tomar una resolución sobre mi futuro. Después del Mundial de Polonia y Francisco (Egas) lo sabe, he dejado de lado muchas propuestas. No quiero decir que tengo ambiciones, pero atrás mío hay una familia y un grupo de personas que quieren dar el salto, que creen que podemos seguir dando pasos. Si el presidente te adelantó esa noticia, es porque es así. Tengo que pensar cómo sigue mi carrera. Ligada a la Federación o lejos de ella”.
El entrenador argentino llegó en el 2017 a la Ecuafútbol para iniciar un proceso de trabajo con las juveniles. Él fue el artífice del proceso de la Selección Sub 20, con la que este año consiguió dos hitos claves: : levantó el título de campeón sudamericano en el torneo de Chile en febrero. A mediados de año, con el mismo equipo alcanzó el tercer lugar del Mundial de Polonia. Entonces sus bonos se elevaron y su nombre empezó a sonar para dirigir el equipo mayor. De hecho, tras el despido de Gómez, el entrenador argentino quedó al cargo de la Selección mayor. Célico empezó a ilusionarse con la posibilidad de asumir la conducción del equipo nacional, pero la divulgación de unos dichos de Egas cerrando esa posibilidad acabaron por desanimarlo y generaron su declaración pública en la que manifestó la posibilidad de irse.
Célico se confesó amigo del directivo Egas, en la rueda de prensa. Dijo que no mezcla lo personal de lo profesional. “Sé la clase de persona que es Francisco y él sabe quién soy. Tengo el mejor concepto de él”. El entrenador dijo que se tomará unos días antes de comunicarle a la Ecuafútbol si sigue en su cargo en las juveniles o escucha propuestas. Una de ellas es la del Barcelona de Guayaquil.