Después de 38 años de trayectoria ininterrumpida, seis generaciones y cerca de 30 millones de ejemplares vendidos en todo el mundo, Volkswagen consideró apropiado actualizar a su modelo insignia: el Golf.
Por eso, la séptima ‘camada’ del popular compacto alemán fue presentada oficialmente el pasado 4 de septiembre en Berlín, en medio de una gran expectativa generada entre los seguidores de la marca y del modelo, en particular.
Desde el punto de vista del diseño, no hay grandes diferencias en comparación con el Golf anterior, lanzado al mercado en el 2009.
Tal es así que muchos pensaron que se trataba de un rediseño de la sexta generación, antes que de un modelo completamente nuevo.
Las principales novedades del Golf 7 se centran en la estructura, en la habitabilidad y en la incorporación de sistemas electrónicos de seguridad que antes no estaban disponibles ni como equipamiento opcional.
En cuanto a lo primero, el modelo toma como base la nueva plataforma MQB que el Grupo Volkswagen antes estrenó en el Seat León y en el Audi A3, que entre sus cualidades incluye un peso reducido.
Gracias a la utilización de aceros de alta resistencia de diferentes grosores forjados en caliente, la rigidez estructural es mayor a pesar de los 100 kilogramos que pierde respecto del Golf anterior. Además, la eficiencia energética se incrementó en un 23%.
Las dimensiones crecieron ligeramente. El nuevo Golf es 56 milímetros más largo que su antecesor, llegando hasta los 4,26 metros de longitud. También es 13 mm más ancho (1,80 metros) y tiene 59 mm más de distancia entre ejes para situarse en 2,64 metros, lo cual beneficia el espacio interior.
Con ello los pasajeros de las plazas delanteras tienen 2 cm más para las piernas, mientras que los de los asientos traseros cuentan con 15 mm adicionales.
El maletero pasó de 350 a 380 litros de capacidad y bajó su altura para facilitar la tarea de guardar en él objetos pesados.
La única cifra que bajó 28 mm fue la altura, que se quedó en 1,45 metros pero que sirvió para mejorar el coeficiente aerodinámico del vehículo, que ahora es de 0,27.
Inicialmente, la gama mecánica estará compuesta por cuatro motores: dos de diésel y dos de gasolina. Los dos primeros serán un 1,6 litros TDI de 105 caballos y un 2,0 litros TDI de 150 caballos, mientras que los de gasolina serán un 1,2 litros TSI de 85 HP y un 1,4 litros TSI de 140 HP, equipado con un mecanismo que desconecta dos cilindros cuando no se requiere mayor potencia para reducir el consumo.
Precisamente el bajo consumo de combustible es una constante en todas las versiones. De hecho, la variante más potente de gasolina requiere apenas 1,3 galones para cubrir una distancia de 100 kilómetros, en promedio.
El conductor podrá elegir entre cuatro modos de operación: Eco, Sport, Normal e Individual, los cuales modifican funciones como la respuesta del motor, el funcionamiento del climatizador, la caja de cambios automática y la dureza de la suspensión, entre otras.
En el Golf 7 el equipamiento en materia de ayudas a la conducción será muy completo y estará a la altura de otros vehículos pertenecientes a segmentos superiores.
Los principales elementos en esa materia son un sistema de frenado automático que también tensa los cinturones de seguridad en caso de colisión inminente, control crucero adaptativo, control de salida del carril, control de cansancio y asistente de parqueo automático.
ALGUNOS DETALLES
La presentación oficial en la capital alemana tuvo que adelantarse cinco horas debido a que un sitio web ruso empezó a filtrar información del modelo.
El Golf de sexta generación será el que menos tiempo permanezca en el mercado. No llegará a cumplir cuatro años.
Durante el Salón de París VW empezará a tomar pedidos del nuevo modelo. Los primeros ejemplares se entregarán en enero.