El Fiat Palio está presente en el país desde la segunda mitad de los años noventa. En ese tiempo se ha consolidado como un modelo fiable y de buen desempeño en la complicada geografía nacional.
El ejemplar de las fotos corresponde a la segunda generación del modelo, puesta a consideración del público hace un poco más de dos años. Se trata del más ‘italiano’ de todos los Palio, pues fue diseñado íntegramente en el Centro de Estilo Fiat de Turín, con el fin de asemejarlo a la gama europea de la marca.
El resultado es evidente: un auto con líneas estilizadas y modernas que le confieren identidad propia, pero que a la vez lo relacionan con sus ‘hermanos’ italianos.
Las dimensiones también crecieron respecto de su antecesor. El nuevo Palio es más largo, ancho, alto y tiene una mayor distancia entre ejes. Ello redunda en una mayor habitabilidad para los cinco ocupantes que puede transportar.
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El habitáculo es acogedor, gracias a las nuevas texturas y colores de los recubrimientos. Los asientos son más ergonómicos y la tapicería es antideslizante.
En el panel de instrumentos resalta la iluminación blanca que contrasta con el rojo intenso de las agujas, para una mejor lectura de los indicadores.
El Fiat Palio está impulsado por un motor Fire Evo de 1,4 litros de cilindrada, capaz de entregar 85 caballos de potencia a 5 750 rpm y 122 Nm de torque a 3 500 rpm. Respecto del propulsor del Palio anterior, ofrece una mejor respuesta de aceleración en bajas revoluciones y una mejor capacidad de recuperación a un régimen de giro medio.
La seguridad se refuerza con los airbags para conductor y pasajero y los frenos ABS. Otros elementos de equipamiento son el cierre centralizado con bloqueo de puertas a los 20 km/h, el aire acondicionado y el radio CD/mp3 con puerto USB y entrada auxiliar.