Cargadores inalámbricos y camionetas totalmente enchufables son ejemplos del crecimiento exponencial de los vehículos eléctricos, a pesar de constituir aún menos del 3% del mercado, dijo a la agencia de noticias AFP, una representante de la industria en una muestra en Los Ángeles (Estados Unidos).
“Todo este nuevo mercado emergió en solo dos o tres años, no únicamente para los vehículos enchufables (PEV), sino también para quienes fabrican y comercializan la infraestructura de los cargadores”, aseguró Genevieve Cullen, vicepresidenta de Electric Drive Transportation of America.
De la mano del mercado de los PEV, crece el negocio de los cargadores y las baterías para autos enchufables e híbridos, “es decir que hay nuevos actores y un nuevo modelo de negocios”, afirmó Cullen en el 26 Simposio Internacional de Vechículos Eléctricos.
“En el 2011 había dos PEV y ahora hay seis. Para fines de este año habrá más de una docena y, para fines del año próximo, habrá más de dos docenas”, sostuvo Cullen, al señalar que las ventas combinadas de PEV e híbridos registraron en el último año un aumento de 45%.
No obstante, su participación en el mercado automotor es minúscula: 2,4% los híbridos y 0,09% los PEV, según Tom Libby, analista de la firma de investigación Polk.
“Tienen que reducir los precios, lo cual es difícil”, dijo Libby a AFP. “Hay automóviles de tamaños similares con los que se obtiene casi la misma economía y son mucho más baratos”, enfatizó Libby.
El mercado de los vehículos eléctricos, que se recargan con cargadores de 240 voltios o, si no hay uno a mano, enchufándolo a un toma corriente normal de 120, tiene como portaestandartes el Volt de GM y el Leaf de Nissan, a la venta en Estados Unidos desde el 2011.
El simposio en el Centro de Convenciones de Los Ángeles, con 200 expositores, 20 vehículos en exposición y 3 000 participantes de 46 países, es la mayor reunión mundial sobre vehículos eléctricos.
Toyota develó allí un 4X4 completamente eléctrico, el primero en el mercado, con una autonomía de 160 kilómetros y a un precio base de USD 49 800.
También se expuso una estación de intercambio de baterías para bicicletas y ‘scooters’ eléctricos, el prototipo EN-V de General Motors (un vehículo ultracompacto) y un cargador inalámbrico para automóviles de la empresa estadounidense Qualcomm.
¿No es demasiado pronto para pensar en tecnología inalámbrica? “En efecto, este desarrollo ocurrió muy rápido”, mencionó Cullen. “ Pero, ¿cómo construyes un mercado para la infraestructura si no hay vehículos suficientes? ¿Y cómo vendes los vehículos si no tienes la infraestructura? ”, sentenció.
Pero una gran preocupación de los usuarios que desean conducir automóviles ‘verdes’, además de su precio, es lo que se llama “la ansiedad de la autonomía”: el usuario teme quedarse en la ruta con el vehículo descargado.
“En lugar de pensar en la estación de gasolina donde uno va y llena el tanque, hay que pensar (en el auto) como en un teléfono celular ”, responde Cullen. “Encuentras un enchufe y lo conectas y ganas un par de barras de recarga”.
El analista Libby concuerda en que un cambio de mentalidad es fundamental: “Es algo que va más allá de la ansiedad por la autonomía. Es necesario un nivel de comodidad que todavía no ha llegado al consumidor”.
Fuente: AFP