Los vehículos debieron atravesar tramos llenos de lodo durante el recorrido del Rally, las condiciones climáticas no ayudaron. AFP
La edición 2016 del Rally Dakar estuvo matizada por etapas poco comunes que fueron dominadas, principalmente, por las condiciones climatológicas.
Este año, la lluvia fue un factor fundamental en el desarrollo de la competición, pues obligó a recortar tramos y a suspender una de las etapas de la carrera.
El impacto del fenómeno de El Niño en la competencia fue muy evidente. Desde el inicio de los preparativos para el Rally, este acontecimiento natural ya empezó a causar los primeros efectos cuando Chile decidió no participar de la organización del certamen.
El gobierno de esa nación optó por suspender su colaboración con la carrera después de que el norte del país sufriera los embates de este fenómeno. En ese momento la organización, Amaury Sports Organisation (ASO), decidió que se correrían 10 etapas en Argentina y solamente tres en Bolivia.
Las tormentas intensas, inundaciones, ríos crecidos y una ola de calor agobiante fueron una constante a lo largo del desarrollo del Dakar. A pesar de ser un hecho que se escapa de las manos de los organizadores, los pilotos participantes no ocultaron su inconformidad con la competencia.
Los que más sufrieron el estado de las rutas fueron los conductores de los cuadrones y motos. EFE
Los corredores más destacados y los fabricantes dijeron que el certamen les pareció más una ruta del Campeonato Mundial de Rally (WRC) que el habitual desafío dakariano. Sin embargo, Marc Coma, director deportivo de la prueba, aseguró que esta edición fue más complicada que la anterior.
“Alguien podría caer en la equivocación de decir que fue un Dakar fácil, pero no fue así. El 64% de los participantes fue capaz de llegar al final, mientras que en el 2013, cuando se largó desde Perú y se terminó en Chile, el porcentaje de arribos fue del 67%. Es decir, la estadística demuestra que fue un certamen duro”, dijo el español.
En la pasada edición del Rally hubo episodios duros para los conductores y sus copilotos cuando se quedaron atrapados en el lodo. EFE
A pesar de estas declaraciones, algunos equipos debieron ajustar su planificación e, incluso, varias escuderías debieron realizar cambios de última hora a los vehículos, preparados originalmente para largas trayectorias sobre arena.
Con el objetivo de mejorar esta situación y de recuperar el espíritu dakariano, la organización está decidida a incluir nuevamente el desierto de Chile (Atacama) y, posiblemente, incorporar a otros países en el recorrido.
La inclemencia del tiempo, con la presencia de lluvia, obligó a que ciertas etapas de la carrera se recortaran y una se suspendiera. EFE
Etienne Lavigne, director de Amaury Sports Organisation (ASO), aseguró que las charlas ya están adelantadas. “Estamos en negociaciones con diversos países. Primero realizaremos una evaluación con Argentina y Bolivia, que fueron los participantes de esta edición. Y mantenemos conversaciones con Chile, Paraguay, Brasil, Uruguay, Ecuador y Colombia para futuras ediciones”, anticipó el directivo.
Otro de los planes que se estaría analizando es el regreso del Rally Dakar, en el mediano plazo, a África, al sur de esta región.