Óscar Bagüí, Máximo Banguera y Hólger Matamoros, los que más jugaron en la Serie A

Máximo Banguera se formó en Espoli. Brilló en Barcelona y fue a El Nacional. Por su parte, 'La Chicharra' Matamoros jugó en D. Cuenca, Barcelona, Liga, Emelec y El Nacional.’

Máximo Banguera se formó en Espoli. Brilló en Barcelona y fue a El Nacional. Por su parte, 'La Chicharra' Matamoros jugó en D. Cuenca, Barcelona, Liga, Emelec y El Nacional.’

Óscar Bagüí (der.) supera a Roberto Garcés, de El Nacional, en un juego del 2015. El lateral jugó en Olmedo, Barcelona y Universidad Católica. Fotos: Archivo / EL COMERCIO

El año pasado, el DT de Emelec, Ismael Rescalvo, adquirió plenos poderes para reorganizar la plantilla y emprendió un proceso de renovación. Talentos experimentados e históricos del club como Esteban Dreer, Pedro Quiñónez, Hólger Matamoros, Juan Carlos Paredes fueron notificados en diciembre que no seguirían en la institución.

Solo quedó uno de los veteranos en la plantilla: el lateral esmeraldeño Óscar Bagüí, cuatro veces campeón con el cuadro eléctrico en la última década. Llegó al equipo en el 2011, procedente de Universidad Católica y aún siente que tiene fútbol en las piernas. A sus 37 años hizo una gran pretemporada con el equipo en su gira por España, en enero. Ahora, es uno de los capitanes del equipo junto a Aníbal Leguizamón y Dixon Arroyo.

El entrenador Rescalvo decidió confiarle el liderazgo del equipo, por su historia en el club y por su capacidad para comunicarse con sus compañeros.
Pero Bagüí no solo registra hitos en Emelec, sino en el fútbol ecuatoriano. El deportista nacido en Borbón es el jugador activo con más partidos en la Serie A: desde su debut en Olmedo, en el 2013, hasta la actualidad lleva 527 partidos.

En el podio de más juegos lo acompañan Máximo Banguera (34 años, 462 partidos) y Hólger Matamoros ( 35 años, 407 cotejos). Ambos ahora son compañeros en El Nacional, club al que llegaron tras ser declarados prescindibles en Barcelona y Emelec, respectivamente.

Máximo Banguera se formó en Espoli. Brilló en Barcelona y fue a El Nacional. Por su parte, 'La Chicharra' Matamoros jugó en D. Cuenca, Barcelona, Liga, Emelec y El Nacional.’

Bagüí dice que la constancia es una de sus fortalezas. Tuvo que soportar largos períodos de ausencias en las canchas por lesiones, pero ahora se mantiene firme en su idea de ser protagonista en sus últimos años como titular.

“La única forma en la que puedes ser ejemplo o influencia para tus compañeros es siendo titular. Por ello, lucho por ganarme un puesto”, declaró el jugador, que aún no debuta en el torneo.

Esa misma convicción es compartida por sus colegas Banguera y Matamoros. El golero, que estuvo 10 años en Barcelona, quedó fuera del ‘Ídolo’ por desencuentros con el presidente Carlos Alfaro Moreno. Llegó al cuadro ‘rojo’ a disputar la titularidad con Johan Padilla, arquero con futuro de Selección.

En el elenco militar, el cálculo era transferir a mediados de temporada a Padilla y consolidar a Banguera en el arco, pero la pandemia del coronavirus ha trastocado planes, calendarios y metas en el balompié.

Banguera se ha mantenido activo en la cuarentena. No solo que se entrena a conciencia en casa, sino que además organiza campañas de ayuda a los desposeídos por la tragedia. Realizó donaciones en Guayaquil y junto a los capitanes de los equipos de la Serie A canaliza más campañas solidarias junto al gremio de futbolistas.

Matamoros tiene un privilegio que pocos jugadores han logrado: al llegar a El Nacional ostenta el haber jugado en los cuatro grandes del fútbol local: Barcelona, Emelec y Liga.

El mediocampista empezó a ganarse la confianza del técnico Eduardo Lara, antes de la paralización del torneo. Quiere ser el eje de los militares. El futbolista se mantiene entrenándose en casa junto a su familia en Quito. Extraña el día a día del fútbol.

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