Glenda Morejón. La marchista imbabureña de 17 años posee un título mundial Sub 18. Se ubica 15ª en el escalafón mundial Sub 20, en 10 000 m. Foto: Francisco Espinosa para EL COMERCIO
David Hurtado y Glenda Morejón son los más destacados de la nueva generación de marchistas ecuatorianos. Ellos, con sus récords nacionales y sudamericanos, siguen los pasos de Jefferson Pérez, doble medallista olímpico y múltiple campeón mundial.
Ambos están conscientes de que la marcha es la disciplina más exitosa de Ecuador y por eso la exigencia es mayor. A los triunfos de Pérez se suma la presea de plata conseguida por Joel Villavicencio en los Juegos Olímpicos de la Juventud del 2010 en Singapur.
La semana pasada, en el Nacional de Sucúa, Morejón cronometró 44:57.38 e impuso récord sudamericano Sub 18 en la prueba de 10 km. Superó el tiempo de la colombiana Sandra Arenas (45:17.00), registrado el 2012 en Salinas.
También pulverizó los récords nacionales absolutos y Sub 20 de su compatriota Miriam Ramón. Esta última tenía los tiempos de 45:04.00 y 45:42.00, en ese orden, cronometrados en 1995 (Suecia) y en 1992 (México).
La andarina imbabureña de 17 años contó que en el 2017 ya mejoró la marca de Arenas, en Estados Unidos, al registrar un tiempo de 45:16.85. Sin embargo, la Confederación Sudamericana de Atletismo (Consudatle) no validó porque fue la única competidora en 10 km.
El 13 de mayo del 2017, en Lima, Perú, terminó tercera en la Copa Panamericana de Marcha, categoría Sub 20. Allí registró 22 minutos y 42 segundos (22.42) y superó el récord de Ramón, vigente desde el 10 de noviembre de 1990.
Ahora se ilusiona con seguir mejorando sus propias marcas y espera hacerlo el 10 de marzo en la Copa Sudamericana de Marcha, con sede en Sucúa. Además, anhela clasificarse al Mundial por equipos que será el 5 de mayo en Taicang, China. Allí pretende ubicarse entre las cinco mejores del mundo.
Según Giovan Delgado, su técnico, los resultados de la campeona mundial de 5 000 metros son fruto de un proceso desde las bases, respetando las etapas. “Glenda comenzó con 2 000 metros, luego pasó a 3 000 y 5 000, este año compite en 10 000 metros”. Luego hará la transición para los 20 000 m.
Hurtado es otro de los talentos de la marcha que hace soñar con sus éxitos. En la actualidad, en los 10 000 m, es segundo en el ranking mundial Sub 20, siendo superado por el chino Jun Zhang. Mientras en los 10 km se ubica tercero, detrás de los japonés Koki Keda y Masatora Kawano.
El 2017, en La Coruña, España, impuso récord sudamericano en 10 km (39:46:0), superando el de Pérez (40:06:00). Con ese tiempo, el excampeón olímpico obtuvo el título mundial juvenil en Seúl, el 17 de septiembre de 1992.
También el año pasado, en Hauppauge, EE.UU., cronometró 19:29.00 y superó la marca de Pérez (19:49.54) en la prueba de 5 km. Pero no fue avalada por la Consudatle porque fue el único participante en la categoría. Él no se desespera y confía que este año pulverizará ese tiempo.
A mediados de enero pasado, Pérez entregó la posta a Hurtado, quien recibió la gorra blanca con la que alcanzó los éxitos olímpicos y mundiales. El andarín pichinchano de 18 años se siente privilegiado y “espero no defraudarlo”.
Xavier Cayambe, su adiestrador, está convencido que el campeón panamericano Sub 20 seguirá en ascenso. “David empezó el 2014 con un tiempo de 52 minutos en los 10 kilómetros, el 2015 hizo 46 minutos, el 2016 registró 41 minutos y el 2017 llegó a 39 minutos”.
A su criterio, la curva de rendimiento de su dirigido es óptima, tras competir en los 3 000 y 5 000 metros. El técnico asegura que, este año, Hurtado mejorará la marca de Pérez en pista. Sus principales desafíos son la Copa Mundo de China (ruta) y el Mundial Sub 20 de Atletismo en Finlandia.
Detrás de Morejón y Hurtado hay otros marchistas como María Belén Villalba, Kimberly Revelo, Marco Salinas, Kevin Fárez, Jandry Guachicasa, entre otros. Ellos esperan sobresalir en el Sudamericano que se realizará en Sucúa.
Según Homero Salazar, jefe técnico de la Federación Ecuatoriana de Atletismo, la marcha es la disciplina que tiene a sus seleccionados entre los mejores del mundo. Es el caso de Morejón y Hurtado. “Ellos tienen una excelente proyección a escala mundial”.
Salazar sugiere precaución con los atletas de las categorías menores para evitar que se aceleren los procesos. Para evitar que eso suceda se contrarresta con seminarios, charlas y planificación. “Estamos concienciando a los entrenadores de todas las provincias”.