Cristian Guanca, de Emelec, domina el balón ante la marca de jugadores albos. Foto: Mario Faustos / EL COMERCIO
Los próximos siete días son determinantes para Barcelona y Emelec. Ambos equipos deberán cumplir con sus últimos juegos diferidos, para luego medirse entre sí, en el Clásico del Astillero, que se disputará en el estadio Monumental este domingo 27 de noviembre.
Al igual que ocurrió en la primera etapa, los cuadros de Guayaquil pelean palmo a palmo por quedarse con el primer puesto. En el primer semestre fue un Clásico el que decidió que los amarillos finalizaran líderes, aseguren un cupo a la Copa Libertadores y se clasificasen a una hipotética final.
El 5-0 que le propinaron los toreros a su rival tradicional fue determinante. Con la victoria, los guayaquileños escalaron posiciones, mientras que Emelec tuvieron un bajón.
Este miércoles 23 de noviembre Barcelona recibirá a Independiente del Valle, mientras que Emelec visitará a Deportivo Cuenca. Ambos partidos corresponden a la fecha 18 del campeonato. Los juegos quedaron diferidos debido a la participación de la Tricolor en las eliminatorias.
Los amarillos, líderes de la etapa, suman 45 unidades. Su campaña es extraordinaria. En sus 17 cotejos de esta etapa, perdieron una vez, empataron dos y ganaron los restantes. Emelec es segundo en la tabla, con cinco puntos menos.
José Cevallos, presidente de Barcelona, tiene clara su meta. “La intención es ser campeones sin jugar final. Se ha hecho un gran trabajo, tenemos una ventaja importante; pero eso aún no nos garantiza el trofeo, tenemos que ganar los juegos que faltan”, dijo.
Una victoria de los amarillos ante los de Sangolquí le allanaría el camino al campeonato, siempre y cuando Emelec no gane en Cuenca. Si eso se da, una victoria en el Clásico del Astillero serviría para levantar el trofeo, a falta de dos fechas.
Para Emelec el panorama es más complejo. Está obligado a ganar todos los partidos que le quedan, pero también debe esperar a que Barcelona pierda o empate sus duelos.
El entrenador azul, Alfredo Arias, es el que más habla de las posibilidades de su equipo. El DT charrúa festeja cada victoria como si se tratasen de finales. “No deben darnos por muertos, somos los tricampeones y vamos a dar pelea hasta el final”, dijo.
Los eléctricos se consolidad como el equipo de mejor rendimiento, con el actual sistema del torneo. Desde el 2010, Emelec suma tres vicecampeonatos y tres títulos. Con ello, estuvieron en las últimas ediciones de las copas continentales.