Indignación y tristeza, fueron dos emociones que se conjugaron ayer entre los aficionados que llegaron a las boleterías de la plaza de toros Quito, para canjear sus entradas por dinero.
Y es que la empresa organizadora de la feria taurina Citotusa puso en marcha la devolución del dinero recibido de parte del público por la venta anticipada de abonos y entradas sueltas para la Feria Jesús del Gran Poder.
Al mediodía, justo a la hora en la que suenan los clarines para dar inicio a una corrida de toros en Quito, una decena de personas hacía fila en las tres ventanillas abiertas para atender a los aficionados que hasta hoy no pueden creer que el evento central de las Fiestas de Quito no exista más.
“Siento una gran tristeza porque este año no habrá toros en Quito. Soy un aficionado de toda la vida y esto que ha sucedido es increíble. Por lo menos la empresa debió comunicar el cierre de la feria con anticipación y no a las puertas del evento”, dice Rómulo López, un riobambeño de 70 años pero quiteño de corazón.
Las señoritas que atendían en las ventanillas no quisieron dar ninguna declaración sobre el tema, aduciendo que la empresa les había prohibido hacerlo.
Sin embargo, López aseguró que no tuvo ningún problema. “Presenté el comprobante de compra, que la hice por medio de mi tarjeta de crédito, y me dieron un recibo en el que consta que inmediatamente Citotusa hará el depósito en mi cuenta”.
Por otro lado, Cecilia Tapia, quiteña de 57 años y ama de casa, mostró su descontento por la situación. “No es por el dinero, sino que es una pena porque la feria de toros es parte de la cultura y las tradiciones de Quito y no es justo que por motivos ajenos a la fiesta los aficionados nos quedemos sin ver el espectáculo”, sentenció.
Finalmente, Stalin Muñoz recibió su dinero al presentar los cinco boletos que compró para ver el que sería un mano a mano entre el diestro español Enrique Ponce y el matador francés Sebastián Castella, dos ‘monstruos’ de la tauromaquia mundial.
“Tenía mucha ilusión de ver esta corrida nocturna con estos toreros que son ídolos de Quito, quería ir con toda mi familia porque todos somos muy aficionados a la fiesta brava. Las Fiestas de Quito definitivamente no serán las mismas sin los toros”, expresó con pesar este capitalino.