Un aficionado de la NBA a tiempo completo

Un aficionado de la NBA a tiempo completo

Un aficionado de la NBA a tiempo completo

Miguel Dávila ama el baloncesto y su cuarto parece un pequeño salón de la fama de este deporte. El quiteño de 22 años posee dos banderines oficiales de la NBA. El uno es de la final de los Lakers ante el Boston en 2008 y el otro es de un partido de los playoffs del Sacramento Kings. Ambos recuerdos les envío su tío Carlos Argüello quien vive en Estados Unidos y conoce del fanatismo de su sobrino.

En el cuarto de Dávila es difícil encontrar un rincón donde no haya objetos de baloncesto. Tiene muñecos de Michael Jordan, pósteres de Miami Heat, balones de algunos equipos, biografías de jugadores emblemáticos de la NBA. Incluso, su vestimenta demuestra la afición que tiene por este deporte. Posee varias zapatillas, gorras, jerseys y chalecos de los quintetos más reconocidos de Estados Unidos.

Uno de sus pasatiempos preferidos es coleccionar zapatillas de ediciones limitadas. Algunas de estas son los modelos Nike de Kobe Bryant, LeBron James y Derrick Rose.

La pasión del fanático hacia al baloncesto empezó cuando tenía 11 años. Él era seleccionado de la Escuela Espejo y jugaban la final ante el Sucre en el coliseo Julio César Hidalgo.

El entonces niño se emocionó al mirar tantas personas gritando en los graderíos por su equipo y a partir de ese momento decidió ser un fiel admirador de este deporte.

Su equipo escolar ganó 69-28 aquella final y él todavía conserva los recortes de la prensa donde sale en los hombros del entrenador festejando el título.

En su adolescencia, Dávila fue seleccionado de Ecuador, Pichincha, el Colegio San Gabriel y otros equipos.

Durante su trayectoria como jugador dividía su tiempo entre el entrenamiento y su fanatismo al baloncesto. En un torneo que se realizó en Colombia y Venezuela, Miguel entrenaba por la mañana y luego se fugaba para asistir a los partidos de la Liga de Baloncesto.

Su padre, quien lleva el mismo nombre, considera que su afición es sana pero, entre risas, admite que puede causar ligeros inconvenientes.

En una ocasión la vicerrectora del colegio le llamó a una reunión para aconsejarle que su hijo debería dedicar menos tiempo al baloncesto.

Actualmente, cuando hay finales de la NBA, Miguel se reúne con sus amigos para mirar el partido y aunque no hacen apuestas, suelen analizar durante horas las jugadas.

Uno de sus amigos, conocía de su fanatismo a los Celtics y antes de la final de este equipo contra los Lakers en 2008 le regaló una tabla de longboard con los colores y los emblemas del club de Boston.

El equipo favorito de Miguel es San Antonio y admira el estilo de juego de Kyrie Irving de los Cleveland. Cuando mira las jugadas del norteamericano recuerda sus épocas de basquetbolista. En su trayectoria ha logrado 46 medallas en torneos locales e internacionales y tiene varios trofeos de campeonatos dentro del país.

Hoja de Vida

Su biografía. Miguel Dávila nació el 21 de julio de 1991.

Estudios. Estuvo en el Colegio San Gabriel Ahora estudia y entrena en U. Católica.

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