Antes de limpiar es importante colocarse guantes para evitar el contacto directo con materiales como el vinagre o cloro. Fotos: Diego Pallero/ CONSTRUIR
La mayoría de las personas sabe cómo y cada cuánto limpiar el inodoro. Sin embargo, pocas conocen el tratamiento que debe recibir el tanque, el lugar donde se almacena el agua y que es ignorado durante meses o años..
El procedimiento es sencillo, pero es necesario contar con los implementos y materiales adecuados para eliminar las bacterias que también se acumulan en ese lugar aunque parezca imposible.
Una limpieza regular también garantizará un aroma fresco en el cuarto del baño. Los expertos sugieren hacerlo, como mínimo, una vez al mes.
El primer paso consiste en colocarse los guantes, pues hay ciertos productos, como el cloro, por ejemplo, que puede afectar su piel. Lo mismo sucede con el vinagre.
Esta tarea de limpieza requiere del uso de guantes para evitar que la piel se maltrate.
Luego, cierre la llave de paso de agua y vacíe el tanque. Observe la cantidad de suciedad. Si está demasiado descuidado necesitará vinagre blanco. Ese producto es ideal para retirar depósitos de minerales duros.
La llave de paso siempre está en la parte inferior, cerca de la base del sanitario.
Si observa humedad será necesario un poco de cloro. Rocíe el líquido con la ayuda de un atomizador. Así será más fácil llegar a las zonas complicadas del tanque como las esquinas, por ejemplo.
Con ese producto eliminará todas las bacterias acumuladas durante meses.
Permita que los líquidos hagan efecto. Cuando hay depósitos minerales tendrá que esperar alrededor de mediodía para jalar la palanca. Caso contrario bastará con 10 0 15 minutos de espera.
Ahora, limpie las paredes del tanque con la ayuda de un cepillo o de una esponja. Tómese el tiempo necesario, pues es importante fregar todos los rincones.
Cepille la base y las paredes del tanque para eliminar manchas y humedad.
Ahora sí, abra la llave de paso, llene el tanque y tire de la cadena. Aléjese un poco para evitar que gotas de agua salpiquen y mojen su rostro.
Coloque un poco de desinfectante y llene el tanque. Luego vacíe. Ahora utilice el inodoro con normalidad.