La altura, el tamaño y el fácil acceso son características indispensables en estos productos. Foto: Cortesía Edesa
Antes los espacios eran diseñados para cumplir necesidades básicas y por eso las áreas de utilidad, como el cuarto de baño por ejemplo, no estaban pensadas para infantes.
Ahora, gracias al diseño y a la tecnología, se puede acceder y crear productos y espacios personalizados. En esa lista están los sanitarios y lavabos.
Para la arquitecta de interiores Joseline Córdova, de JK Design Concepts, crear un baño para niños es lo ideal, ya que para ellos es difícil adaptarse a sitios, muebles o accesorios que carecen de medidas adecuadas para su estatura, sobre todo, en un área de constante uso como el cuarto de baño.
Otro detalle importante es que para los infantes de 4 y 5 años es necesario un retrete acorde a su medida, ya que están en un proceso de aprendizaje y transición.
En el mercado se comercializan inodoros que están hechos del mismo material de uno para un adulto, por lo general de porcelana debido a su resistencia y fácil mantenimiento.
Los colores y los accesorios se eligen según la edad de los usuarios. Priman colores pasteles para su confort. Foto: Cortesía Edesa
Las medidas estándares para los niños son de 52,5 centímetros de largo por 32,5 de ancho y una altura máxima de 62,5 centímetros.
En Edesa, por ejemplo, los sanitarios que se ofrecen para los más pequeños tienen una altura, desde el piso hasta el tope del tanque, de 55,5 centímetros. Indican que estos productos son fáciles de instalar y retirar cuando el niño crezca.
En FV, por su parte, el retrete está diseñado en una sola pieza, de taza redonda.
También cuenta con tecnología de alta eficiencia con un consumo de 3,5 litros para líquidos y 4,8 para sólidos. Su altura es de 31 centímetros y es ideal para niños de hasta 5 años. Estos sanitarios están fabricados en porcelana vitrificada, al igual que los diseños para los adultos, ya que se trata de un material higiénico debido a su baja absorción y su fácil limpieza.
Por otro lado, se recomienda que todo el ambiente vaya acorde a la edad de los infantes. Para esto se pueden utilizar colores exclusivos, que generalmente van en tonos pasteles o pálidos, porque evocan un ambiente tranquilo y relajado.
Los especialistas acuerdan que el espacio de baño único para el niño le permitirá generar independencia en sus actividades de aseo y a la vez desarrollar habilidades visuales a través de la identificación de colores y formas en el diseño.
En cuanto a los materiales del piso o paredes, la diseñadora Córdova señala que no hay una regla, todo depende de lo que se busque y de la personalidad del pequeño.
Se pueden tener baños con pisos y paredes de porcelanato, cerámica, pintura, apliques, o colocar un revestimiento acolchonado, incluso tener sistemas de climatización.
Los sanitarios incluyen tecnología para ahorrar agua.
Los diseños cuentan con fácil accionamiento. Foto: Cortesía FV
Para la especialista, el color es clave. Recomienda los tonos pasteles y vivos como el naranja, el amarillo, el verde, el lila, el rosa y el azul. Aconseja combinarlos y, como principio básico, evitar sobrecargar el área.
La seguridad e higiene es otro aspecto que se debe considerar. Los sanitarios deben incluir tapas con cierre suave. En cuanto a los asientos, es recomendable que sean de plástico resistente, por ser un material liviano y de fácil mantenimiento; además, es aconsejable que ofrezcan el sistema de fácil limpieza, es decir que se puedan sacar y poner de forma sencilla para poder lavarlos. De igual manera, el accionamiento para la descarga debe ser sencillo y suave, y de fácil acceso.
En cuestión de accesorios, es clave que existan soportes, toalleros y portapapeles que estén a su altura, de materiales que sean resistentes y de mantenimiento e instalación sencillos, para que después se puedan cambiar.