La guadúa está de regreso en Lita, Imbabura

Las seis cabañas, restaurante y recepción de este inmueble destinado al turismo se levantaron cerca al río de Lita. La construcción armoniza con el entorno subtropical. Fotos: Washington benalcázar / EL COMERCIO

Las seis cabañas, restaurante y recepción de este inmueble destinado al turismo se levantaron cerca al río de Lita. La construcción armoniza con el entorno subtropical. Fotos: Washington benalcázar / EL COMERCIO

Las seis cabañas, restaurante y recepción de este inmueble destinado al turismo se levantaron cerca al río de Lita. La construcción armoniza con el entorno subtropical. Fotos: Washington benalcázar / EL COMERCIO

Los inmuebles de caña guadúa se conjugan con el bosque tropical. Una de esas edificaciones se levanta en la parroquia de Lita, cantón Ibarra (Imbabura). Se trata del proyecto denominado Centro de Desarrollo Turístico, cuya construcción cuesta USD 1 millón y es financiado por el Municipio.

¿Por qué con caña guadúa? Porque es un material atractivo y amigable con el entorno, explica Hugo Aguirre, presidente de la Junta Parroquial.

En la construcción se utilizó caña guadúa de la variedad conocida como colombiana, traída de Puerto Quito.

Recuerda que cuando era niño, todas las viviendas de este poblado subtropical, vecinos de la provincia de Esmeraldas, se edificaban con madera extraída del bosque, como la chonta, grillo, chanul, copal y la caña guadúa.

Sin embargo, con el paso del tiempo las casas de hormigón armado fueron desplazando a las anteriores.

La idea de utilizar la caña guadúa es que la población retome estos materiales y recuperen las técnicas ancestrales de construcción.

La edificación del Centro de Desarrollo Turístico está a cargo de la empresa Chiriboga Sandoval Construcciones, una firma imbabureña con experiencia en el tema.

Entre sus trabajos están 108 casas, de la comunidad del Milenio Dureno Cofán, en Sucumbíos, edificadas con cañas de bambú, hace un año.

Según Eduardo Murillo, socio de la empresa, el proyecto en Lita incluye seis cabañas de hospedaje, de 42 m2 de construcción. Cada una posee dos dormitorios, una sala-comedor , cocina y baño.

Una de las novedades es que en la cubierta posee dos pares de alas móviles, que se accionan con la ayuda de poleas, para una mejor ventilación.

También hay un área administrativa, de 150 m², y un restaurante de 350 m², dividido en ocho patios de comida.

La idea es que estos últimos sean manejados por las comunidades mestiza, afroecuatoriana e indígena Awa de la parroquia, para que muestren su cultura y gastronomía autóctona, comenta Aguirre.

Las cabañas se comenzaron a construir en agosto pasado y deberán estar listas el 20 de febrero del 2018. En el sistema constructivo se utilizó una técnica mixta, detalla William Chiriboga, otro de los socios de la constructora.

Explica que la cimentación es de hormigón, las vigas de los pisos y paredes, de madera y el resto, de caña guadúa.

Para ejecutar el proyecto con materiales artesanales se han sumado los conocimientos técnicos de los ingenieros y arquitectos con la experiencia de los artesanos constructores, que trabajan la caña, como Antony Suárez, nativo de Santa Elena, que aprendió la técnica de su padre, Juan.

Suárez explica que son conocimientos del pueblo montuvio. Es por ello, que la constructora contrató los servicios de 12 obreros de la Costa.

Según Edwin Cerda, otro de los técnicos de la firma, hay que cuidar el tema los materiales que se usan. Asegura que para esta obra se escogió el bambú y la caña guadúa conocida como colombiana, que tiene un diámetro de 9 a 15 cm y canutos de 30 a 40 centímetros.

La tradición ancestral dicta que la guadúa debe ser cortada en luna llena, para ser más resistente. Luego se le extrae el agua y se le sumerge en piscinas de ácido bórico y bórax, para evitar que posteriormente sea atacadas por la polilla.

Según los especialistas, una casa de caña guadúa puede durar hasta 40 años, con una limpieza y barnizado periódico.

El Centro de Desarrollo Turístico de Lita también estará equipado con canchas de fútbol, baloncesto y vóley y una piscina con tobogán.

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