El diseño lumínico de Kiro Cumbayá es un ejemplo de lo que se puede hacer con LED. Fotos: cortesías Home Identity, Creando una Imagen y www.archiproducts.com
En arquitectura, diseño y decoración, los sistemas de iluminación se inclinan por lo LED (Light Emitting Diode, por sus siglas en inglés). Las alternativas van desde lo constructivo hasta lo decorativo.
Mangueras, paneles y bombillas son algunas alternativas que se pueden implementar en cualquier ambiente de la casa.
Para hablar de esta tendencia, que en algunos lugares del mundo ya es parte de la normativa constructiva, hay que partir de sus posibilidades de ahorro. No solamente contribuyen con la economía de la casa y el cuidado del planeta, sino también con la decoración y el diseño interior.
Las luces de Creando una Imagen incluyen opciones que son parte de la arquitectura.
Pedro Sega, gerente de productos para América Latina de Ledvance, indica que las lámparas LED son hasta un 90% más económicas que las incandescentes y hasta un 30% más que las fluorescentes. “La tecnología LED, con solamente 8W de potencia, es capaz de iluminar con la misma intensidad que una lámpara incandescente de 60W o de una fluorescente de 15W”.
Además, Sega explica que poseen, en promedio, una vida útil de 25 mil horas. Es decir, si se usan todo el día, sin descanso, solo necesitarían ser cambiados luego de dos años y diez meses. El gerente general de Creando una Imagen, Andrés Cruz, coincide con estas bondades. Dice que las LED han tenido grandes avances: reducción de costos y aumento de sus aplicaciones.
Lámpara Apollo, de Cattelan, ideal para el comedor.
“Cada día se está imponiendo más el uso del LED debido a que no es una bombilla, sino un circuito electrónico. El flujo de la luz en estas lámparas permite dirigirlas al área que se desee sin perder energía en haces de luz que van en otras direcciones (como es el caso de los focos comunes). Así se incrementa la uniformidad lumínica y se reduce la pérdida de iluminación entre fuentes”.
Técnicamente, otra ventaja de las LED, que no puede pasar por alto, es su índice de rendimiento cromático (CRI). En estas se tiene un CRI de 90, contra un 44 de los focos comunes, explica Cruz.
“Esto da como resultado colores más puros, nítidos, vivos y profundos. Estas lámparas vienen en una amplia versatilidad de colores, que no necesitan de filtros para que se puedan apreciar”.
La Baban, línea Cattelan, se encuentra en Home Identity.
A estas cualidades se suma que esta luz no emite rayos ultravioletas ni infrarrojos.
“Producen una pérdida mínima por calor y ahorran energía, esto ayuda enormemente a la protección del medioambiente y a reducir las emisiones de CO2. Los focos son reciclables y no contaminan si se tiran como las lámparas de sodio o mercurio o como los focos ahorradores. Estos últimos emiten ondas electromagnéticas dañinas para la salud a corta distancia”.
A todas estas bondades se suma la capacidad para introducir luz LED como parte del diseño interior del hogar. Esto, a través de incorporaciones arquitectónicas o de lámparas de diferentes tipos, según el espacio de la casa.
Francisco Araujo, gerente general de Home Identity, habla de este aporte a través de las Cattelan Italia, línea de iluminación que incluye lámparas colgantes, de piso y mesa, con diseños sobrios.
Edge Reader, de Astro Lighting, permite orientar la luz.
Fiel a la tendencia moderna, el profesional recomienda esta línea, constituida por materiales como el vidrio, acero, metacrilato, entre otros, conjugados con modelos novedosos. Con esto, asegura, se puede conseguir el complemento ideal para diferentes ambientes de la casa.
Como esta alternativa, a nivel local se encuentran opciones como Flos y Foscarini, diseños a los que basta con añadirles un foco LED para conseguir el paquete completo de sus beneficios.