La Microbiblioteca Bima está en Bandung. FOTO: Plataforma Arquitectura
Fachadas permeables. Esa es la nueva preferencia en el mundo de la arquitectura. El recurso de terminación brinda mejor ventilación, visibilidad e iluminación.
Según el portal ArchDaily algunas de las obras ganadoras del Building of the Year -los premios se entregaron en febrero pasado- incluyeron ese recurso y hay muchas otras alrededor del mundo. Uno de esos proyectos, precisamente, está en Colombia.
Se trata de la Fundación Santa Fe de Bogotá. La fachada utiliza ladrillos en extensión en lugar de compresión, a través de cables y platinas que los sujeta a manera de tejido. Aquello permite que aparezcan diferentes tamices y texturas que otorgan iluminación a cada uno de los espacios, dependiendo de su necesidad y uso, favoreciendo así la recuperación de los pacientes.
En Bogotá, la Fundación Santa Fe. Fotos: Plataforma Arquitectura
The MaoHaus, en cambio, es una pieza de fachada experimental que explora el contexto histórico, potenciales materiales y cualidades performativas dentro de la arquitectura.
Tomando el marco simple y la condición de borde de la estructura existente, la fachada entra al espacio del hutong -callejón estrecho- como una tela que fluye.
Las perforaciones de la superficie sirven para filtrar la luz. Durante el día, los rayos del sol entran en el vestíbulo, mientras que por la noche las aperturas sintonizadas con precisión revelan un tríptico del retrato prototípico del presidente Mao.
La expresión del presidente Mao dentro de la fachada es un guiño al contexto histórico del sitio.
El Hotel Emiliano está Río de Janeiro. Fotos: Plataforma Arquitectura
El proyecto está ubicado en el centro de Beijing, adyacente a la tienda de impresión The People’s Art House. Ese taller fue una vez uno de los principales productores de la ahora icónica imagen del Presidente.
La estructura de la fachada aprovecha las propiedades materiales del concreto de rendimiento ultra alto, para crear una nueva forma arquitectónica.
Con una altura de 4-7 metros, 2 metros de ancho y 7 centímetros de grosor, seis paneles individuales cubren la fachada sin necesidad de una subestructura o soporte. Cada panel está formado como una sola unidad de moldes CNC de gran tamaño.
En la lista de proyectos llamativos también figura Saint Peter House. Esa vivienda integra elementos de materialidad local como el tabique rojo. El uso del material de manera artesanal permite, según los promotores del proyecto, la generación de geometrías expresivas con base en la repetición modular en extraplomo. Aquello genera una vivienda introvertida que incorpora la iluminación y ventilación natural por medio de las aberturas en celosías y ventanas.