Hay opciones eléctricas que proporcionan masajes relajantes en el cuerpo y en los pies. Fotos: Julio Estrella/ EL COMERCIO
Un sitio para alcanzar paz, armonía, comodidad y descanso es lo que se busca en el hogar. Los días ajetreados de la vida actual hacen que la casa se convierta en un verdadero templo, que se logra, por ejemplo, con la instalación del equipamiento adecuado.
Por eso es vital pensar en las necesidades de los más grandes de la casa: los abuelos.
Mayor comodidad, atención y seguridad son requisitos necesarios en el momento de elegir el mobiliario para esos miembros de la familia.
Evitar texturas y materiales que resulten incómodos e inadecuados para ellos sin duda facilitará sus actividades dentro de la casa.
Para satisfacer esos requerimientos se diseñan muebles reclinables, con texturas suaves, sistemas ergonómicos y funciones que incorporan la tecnología adecuada para garantizar su bienestar.
Considerando que, en algunos casos, los adultos mayores requieren pasar mucho tiempo sentados o acostados, la arquitecta Carolina Zambrano indica que los muebles deben estar diseñados para brindarles posiciones cómodas.
Explica que se debe considerar el alto del asiento y un espaldar idóneo, que garantice permanencias prolongadas.
El interiorista José Antonio Rivas asegura que es fundamental una buena regulación de los ángulos presentes entre el asiento y el espaldar.
“Estos deberían formar un ángulo de 110 grados como mínimo. Es mucho mejor si ese tipo de muebles es regulable”.
En el mercado existen sillones que logran cambios de posiciones de hasta 180 grados y cambian el eje central.
Eso contribuye a una buena circulación de la sangre hacia el corazón y el cerebro, creando un buen descanso y relajación, explica Rivas.
“Esta posición también ayuda a mantener una respiración perfecta”.
Las medidas ideales para estos muebles alcanzan una altura de 110 cm por 93 cm de ancho y 83 cm de profundidad.
Los muebles reclinables manuales son otra opción. Se recomienda que tengan brazos.
Para lograr el confort que merecen estos usuarios, Zambrano recomienda evitar los muebles de colores oscuros y rojos. Recomienda inclinarse por tonos neutrales como los blancos, grises, verdes o azules, pues transmiten paz y tranquilidad.
Para llegar a ese estado, la arquitecta también habla de la importancia de los elementos que rodean a los muebles.
Sugiere que en el ambiente se usen colores alegres para los accesorios y ropa de cama.
“No hay que usar alfombras porque son peligrosas y se deberían retirar los muebles que no se usen para dejar el mayor espacio libre posible”.
Los materiales del mobiliario también juegan un papel importante. Martha Rodríguez, interiorista, considera que el tapiz de cuero es ideal, considerando que no cambia de temperatura drásticamente. Además, es de fácil limpieza y semiimpermeable.
Hay opciones con diversas texturas. El cuero de fácil limpieza.
Las estructuras pueden ser de madera o metal. Si evita el cuero, las telas y tapices que se puedan limpiar sin problema son otra alternativa.
Un mueble reclinable eléctrico, de cuero puro, con estructura de madera sólida alcanza los USD 1 700. Si prefiere mobiliario en microfibra y manual hay modelos desde los USD 700.