Los colores neutros se mantienen entre los favoritos

El blanco luce a la perfección con colores cálidos o fríos.

El blanco luce a la perfección con colores cálidos o fríos.

En paredes o mobiliario, estos colores permiten crear ambientes modernos, cálidos y amplios. Fotos: Cortesía Estudio 593

El inicio del año es la oportunidad perfecta para renovar en todo sentido. Por ello, esta temporada es ideal para restaurar las estancias de la vivienda incluyendo algunas nuevas tendencias en estilos, materiales y color.

Ese último recurso es el preferido por su versatilidad, pero pese a que hay tonos que están de moda, los neutros son los aliados de siempre por sus múltiples ventajas.

Anamilena Paredes, arquitecta especializada en interiores de Estudio 593, explica que estos colores son una tendencia que se ha prolongado a lo largo del tiempo porque van con todos los estilos, aportan luz, calidez, y logran un aspecto de limpieza y elegancia en los ambientes.

El blanco luce a la perfección con colores cálidos o fríos.

La gran ventaja es que permiten un balance en el espacio, además, son como un lienzo que se ajusta a cualquier paleta cromática, forma y textura. Dentro de los neutros están el blanco, gris, beige y negro, que se dividen en fríos o cálidos. Esto significa que se ajustan mejor a otros tonos que tengan esa división. Por ejemplo, un gris, considerado un color frío, combinará mejor con otros de esa categoría como los azules, violetas, turquesa.

Se pueden aplicar tanto en mobiliario como en paredes, pero la clave está en seguir una linealidad, es decir si se aplica un gris claro se irá hacia un gris oscuro o negro; a este último lo recomienda solo en detalles.

Los detalles de color deben aplicarse con delicadeza.

Por el contrario, si se coloca un beige (cálido) se combinará con un tono arena, coñac o madera. De esta forma se logrará un espacio armonioso. “Del claro al oscuro debe haber una transición. Eso ayudará a que el espacio tenga sentido y armonía”, añade la arquitecta.

En cuanto a estilos, todos estos colores son adaptables, pero siempre están relacionados a lo moderno, industrial y minimalista. La arquitecta indica que en el pasado los espacios estaban saturados de color, tanto en los pisos como en las paredes, cortinas y mobiliario. Reinaban los estampados, las formas onduladas y los detalles. En la actualidad se impone la idea de menos es más por lo que estos colores son perfectos. Se tendrá ambientes más sobrios, elegantes y simples en donde resalten pequeñas piezas o detalles.

Los neutros se incluyen en mobiliario, decoración y paredes.

Por otro lado, la especialista sostiene que sí es importante aplicar toques de color para que la estancia no vea plana. Estos detalles van a estar presentes en cojines, en piezas decorativas o en cuadros.

Si se utiliza en mobiliario, se puede complementar con auxiliares como una mesa de centro con color o un estante en otro tono y se pueden añadir texturas y estampados.

Para Paredes, lo importante es que, si se decide por un espacio neutro debe mantener ese principio. Hay que evitar colores, texturas, estampados o decoración bajo la idea de que casi todo combina con la paleta cromática. Todo detalle extra de color en el espacio se aplica de forma delicada para lograr un balance y armonía.

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