En relación al artículo que apareció en EL COMERCIO (21-03-2014) y que da nombre a esta impugnación en calidad de comentario, quiero manifestar mi total desacuerdo y que además marca el sentimiento del 80% de los ecuatorianos que ve en la dolarización una medida favorable y la razón es muy simple: el país camina. Lo del supuesto “milagro” para Blaque es para nosotros, atraso, no lo prueba acaso las exportaciones petroleras y las contradicciones habidas, el doble y cínico discurso de sus defensores. El milagro no es lo que cree este señor, pues en realidad somos un cochinito bien obeso y terco que cada día le quita espacio a la iniciativa privada, tanto es así que -lo afirman los economistas serios-, el Estado en el 2006 representaba alrededor del 20% del PIB, mientras en la actualidad marca un 45% desproporcionado. Todo quiere hacer el Estado,¿dónde queda el talento de los líderes ecuatorianos que en otras latitudes demuestran su genialidad? No hay duda que mientras el inglés Willian Blaque, poeta genial, es un “Lebrel del cielo”, este, y en el peor rango Estadounidense, es un perro del infierno, que con su teoría nos quiere empañar nuestra libertad, tan cara y preciada en estos duros tiempos.