No voy a referirme específicamente al esquema coreográfico de un grupo de mujeres que viralizaron como video este tema, sino al texto de la columna de OPINIÓN DE Oscar Vela en EL COMERCIO de domingo 15, 2019, con el título: “Podrías ser tú”.
Sencillamente me cuesta entender el fanatismo con el cual, este buen escritor (así lo considero), enfoca el tema, respaldando incondicionalmente a las protagonistas de esta polémica coreografía, en la cual señalan con el dedo a todos los hombres como potenciales o reales violadores. Y, según Vela, hay que aceptar y alabar incondicionalmente esta “acusación”, so pena de ser calificado (por el columnista), caso de no hacerlo, como “estúpido”, “machista”, etc. Continuando, hace la “aclaración” de que la mujer puede vestirse como quiera y tener sus propias actitudes, lo cual es totalmente cierto, y nadie por ello o sin ello, puede agredir a la mujer. Aclaración redundante entonces. Y, fundamentalismo en el apoyo, mostrándose ofensivo contra todo individuo, organismo, etc., que no sea femenino. Ya dirá que hay que entender la “profundidad simbólica del contexto, y otras cosas”, pero nada le quita este traspié a Vela, que ha incurrido en el culto a un sofisma.