Como buen quiteño, hijo de chagra naturalmente, respaldo la carta de Armando Romero Moreno (EL COMERCIO- 2012-01-05) aclarando lo expresado por Alvarado Espinel.
No es en Quito donde se ha concentrado gran parte de la amplia obra del Gobierno; sería largo enumerar las obras privilegiadas que han merecido tanto en la salud como en lo administrativo, técnica y científicamente, hasta llegar a ser pioneras en el país e incluso en nuestra América, con dotación de equipos de última generación y que no han sido realizadas precisamente en Quito.
De tal manera que sí hay lugares que han merecido deferencias del Gobierno; no quiero pensar que el señor presidente, Rafael Correa, padezca de regionalismo, a pesar de sus preferencias por lo costeño, pero sí un pequeño círculo íntimo de funcionarios que tienen facultades decisorias y tienen sus favoritismos.