En el último feriado aprovechamos en familia y fuimos a las playas de Tonsupa y Atacames, que volvieron a poblarse de turistas de la Sierra. El alojamiento tuvo algo de descuento, alrededor del 25 %, no así la alimentación. Los ceviches de concha y camarón estuvieron a 5 dólares cada uno; los platos a la carta: encocados de pescado, camarón, corvina, pargo, etc., de 7 dólares en adelante. Sin miedo a los temblores, terremotos y sunamis disfrutamos del mar y sus beneficios en este verano 2016.
La carretera entre Quito y Esmeraldas (nos fuimos por el noroccidente de Pichincha) está en buenas condiciones, salvo pequeños trechos que están en reparación. El malecón de Atacames fue el más concurrido, en especial por las noches. Hubo días de poco y mucho sol, también la lluvia dijo presente y en general fue un feriado corto pero hermoso. ¡Con ánimo renovado, volvamos los ojos al trabajo!