Casi me caigo de espaldas al leer la noticia publicada en la prensa acerca de que nuestros “honorables” asambleístas se han subido el sueldo de USD 5200 a 5 700 por mes con retroactividad a enero.
En buen romance eso significa: USD 5700 x 120 x 12 = 8 208 000 por año por concepto de sueldos sin contar décimos, beneficios sociales, secretarios, choferes, guardaespaldas, etc. Diría que la cifra rondaría los 20 000 000 anuales, pagados con su plata y mi plata.
Pocos ecuatorianos verán esa cifra en un año. El sueldo se lo paga en premio al trabajo realizado, en cuanto a los asambleístas, ¿premio a qué?
A levantar obedientemente la mano cada vez que a su majestad se le ocurre una de sus “magníficas ideas”.
Señores de la oposición, ¡qué pena ! Cuando de plata se trata, ahí sí están de ñaños y compadres! No importa la ideología! Mientras tanto la clase media ahogada con impuestos para todo, con servicios básicos de llorar, jubilados tratados como basura y de la seguridad, mejor ni hablar. ¡Pobre país!
Solo falta que Chiriboga se suba el sueldo por su “extraordinaria” gestión al frente de la FEF, o que Barrera se lo suba por ser el “mejor” alcalde que Quito ha tenido.
Cada día cobra más vigencia la profecía de Santa Marianita de Jesús: “ El Ecuador no se acabará por desastres naturales sino por malos gobiernos”.
Dios nos ayude.