Sí, tenemos un país maravilloso, sus diferentes regiones impactan los ojos de los turistas. Los tesoros de Arte Quiteño son un concepto distinto de todo lo que se hacía en Europa.
Los templos quiteños son la más clara demostración de ello, pocas ciudades hispanoamericanas son tan privilegiadas como Quito en esto de poseer bellos edificios religiosos.
Ciudades como Cuenca encantan a los turistas, los ecuatorianos con su hospitalidad, amabilidad, cortesía, son virtudes que los turistas aprecian.
Pero somos el país más caro de América del Sur, y hemos perdido muchos turistas que prefieren Perú, Colombia, y ahora Bolivia; los hoteles, restaurantes, transportes, agencias de viajes deberían bajar sus precios para poder ser competitivos y atraer más turismo.