Nació en Matagalpa, Nicaragua, de familia humilde, pronto sintió los atropellos y la dictadura de la familia Somoza. Tomás Borge fue un hombre de principios que luchó para que en su país exista democracia y libertad.
En 1961 funda con otros verdaderos revolucionarios el Frente Sandinista de Liberación Nacional, varias veces encarcelado y torturado salvajemente por la guardia somocista supo enfrentar y hacer valer sus principios. Cuando triunfó la Revolución Nicaragüense fue el único sobreviviente de los fundadores del FSLN, los otros ya habían sido asesinados.
Acaba de fallecer en Managua y quienes creemos en el único Socialismo que existe y no en esas novelerías de socialismo del siglo XXI o que apoyan a secuestradores y narcotraficantes haciéndose pasar por socialistas, sentimos pesar por la muerte de uno de los más emblemáticos revolucionarios de América. Ha hecho bien en callar su muerte el Gobierno actual de Ecuador ya que no estaría bien que un populismo de derecha “lamente” su fallecimiento.