En este 2019 pasaron desapercibidos totalmente el bicentenario del Congreso de Angostura que inició sus labores el 15 de febrero de 1819; el bicentenario de la muerte de Juan Pío Montúfar y Larrea, Marqués de Selva Alegre y presidente de la Junta Soberana de Quito, ocurrida el 3 de octubre de 1819 y ahora en este mes el de la Constitución de Angostura expedida hace doscientos años, el 17 de diciembre de 1819.
El contexto de este tercer bicentenario olvidado es el siguiente.
El 15 de febrero de 1819 inició sus labores una asamblea en la ciudad de Angostura.
Diez meses más tarde, el 17 de diciembre se redactó y aprobó la Ley Fundamental de la República de Colombia la misma que integró en un solo Estado a la Capitanía General de Venezuela y al Virreinato de Nueva Granada, pese a que aún no habían logrado totalmente su independencia y se mantenían en parte bajo el poder de España.
Este nuevo Estado se dividía en tres departamentos: Venezuela, con su capital Caracas; Quito, con su capital Quito; y Cundinamarca, con su capital Bogotá.
El Congreso también nombró a Simón Bolívar como presidente de Colombia y a Francisco Antonio Zea como Vicepresidente, al Gral. Francisco de Paula Santander como Vicepresidente del Departamento de Cundinamarca, al Dr. Juan Germán Roscio como Vicepresidente del de Venezuela. De Quito no se nombró porque no tenía representantes. Estos datos históricos ponen en evidencia que el Congreso y la Constitución de Angostura son claves en el inicio de nuestros estados e instituciones republicanas.