¡Axioma incontrovertible!- El sexo es principio de la vida, su punto de partida. Placer sexual, creado por Dios, dado al hombre y la mujer, para generar vida. La unión sexual que se encarna en el hijo es fruto de vida. Cada ser humano es un ente de vida. Todo acto contra su integridad: aborto, homicidio, asesinato, suicidio, eutanasia, eugenesia, destrucción intencional de la vida, extinción provocada, no natural, es muerte.
Violación, violencia, anticonceptivos, también son atentados directos contra la vida, aunque no conlleven el final físico. La muerte natural es parte del proceso existencial. Atentar, de cualquier modo, contra la vida, trastoca la armonía de la Naturaleza, que es la voluntad del Sumo Hacedor, en su plan de la Creación.- Por eso, en el orden natural, nada justifica acabar la vida del ser en gestación. El aborto es extinción de vida, aunque algunos lo defiendan a conveniencia. El aborto no deja de ser muerte. Verdad clara y evidente.