Si no tuviste la oportunidad de ver Roma, una de las películas más destacadas durante el anterior periodo de premios cinematográficos, arriésgate a verla. Vale la pena ya que más que una película es un reflejo crudo pero bastante real de la sociedad en la que tú y yo desarrollamos nuestras vidas. Roma cuenta la historia de Cleo, una joven mexicana de raza indígena, que trabaja en las labores domésticas dentro de una casa de clase media-alta en la colonia Roma, dentro de la ciudad de México. Películas como Roma nos muestran de qué forma el arte ejerce gran influencia sobre el reconocimiento de una figura que es invisibilizada dentro del diario vivir: la mujer.
Ella es la tercera fuerza que se propaga dentro de esta experiencia cinematográfica y que nos muestra el poder de Cleo al llevar a cabo labores domésticas, maternales y personales dentro de un entorno agitado, acelerado y destructivo.
Es importante darle una oportunidad a películas como Roma debido a que ponen sobre la mesa temas que pocas veces son tocados y nos hacen cuestionar la importancia de la labor que lleva la mujer dentro de nuestras vidas y sociedades.