Los ecuatorianos vemos con estupor cómo se roban millones de dólares del erario público; haciendo mal uso de claves y generando millonarios desfalcos al Estado, como ha pasado en el Municipio de Riobamba, o en el Ministerio del Medio Ambiente, entre otros.
Como ingeniero me parece que el sistema de transferencias del Estado actualmente tiene debilidades, y por más que tenga claves de acceso no es suficiente como se ha podido comprobar con múltiples robos que afectan a todos.
No es posible que el sistema actual permita que se transfieran cientos de miles de dólares a “Pepita Pérez”. ¿Cómo puede darse eso?, ¿Por qué no existen filtros en los beneficiarios? Primero deberían tener un RUC, un RUP, estar en lista blanca, tener una cuenta registrada en el sistema de pagos del Estado. Luego se debe categorizar a los proveedores en montos máximos que pueden recibir según el tamaño de las empresas y servicios que den, debe además existir un filtro temporal, y solo aquellos que estén haciendo un trabajo o vendiendo algo en un lapso de tiempo X, en una instrucción pública Z, y precalificados, puedan recibir transferencias. Y contar con un sistema de alarmas tempranas y autobloqueo, con inteligencia de bases de datos, autenticación de direcciones electrónicas IP, entre otras cosas. ¿Por qué el sistema no manda un mensaje sms a un gerente o director financiero cuando se transfieren montos altos como sí hacen algunas empresas emisoras de tarjetas de crédito para que el cliente verifique o incluso bloquee un cargo? El BCE debe poner cartas en el asunto de manera urgente, estos robos ya deben parar y las soluciones tecnológicas están a la mano. Antes las bóvedas eran de acero, hoy, digitales. Son cosas realizables en corto y mediano plazos, si necesitan ayuda vayan a la EPN.