Así lo demostraron las autoridades actuales tanto del Gobierno como las municipales que brillaron con su ausencia durante el acto de elevada cultura que se cumplió el pasado viernes 23, en el Salón del Sesquicentenario para celebrar dignamente la promulgación de la Primera Carta Magna que se redactó en esta ciudad, en esta fecha hace ya 186 años, sin que jamás se haya realizado ningún evento que refresque la memoria de los riobambeños y ecuatorianos en general que, por cierto, permanece en el olvido precisamente por la ignorancia de la historia que tienen estos señores y que se niegan a ilustrarse en este sentido con eventos de esta categoría que se dan muy esporádicamente y sin embargo no aprovechan para ilustrarse debidamente sobre estos hechos.
El propósito de este evento tan importante y trascendental fue precisamente el de buscar la manera de que en esta ciudad de las primicias se construya un monumento a la primera carta magna que se dio en 1830 para que se inicie formalmente la vida de la República. Pero, felizmente y como contrapartida de esta inexplicable decida de estas autoridades, en cambio, asistieron destacadas y reconocidas personalidades de la cultura nacional, viajando desde Quito con la mayor satisfacción y comedimiento, los señores Dr. César Muñoz Llerena, conferencista notable, el Dr. César Augusto Alarcón Costta, el mejor editorialista de la Televisión nacional, la Dra. América Ibarra Parra, Directora de la Revista “Emprendedores”, la Lcda. Lolita Díaz ex gobernadora de Chimborazo, numerosos maestros jubilados y personas de la educación y cultura de Riobamba. Pero menos los que sabemos que solo buscan la reelección.