Agradezco el envío de una copia del oficio del 22 de mayo en que el “Representante de los Afiliados al Directorio del Biess” descalifica mi columna titulada “¿Ponzi ecuatoriano?”, pero sin desvirtuar ninguno de los argumentos ahí expuestos.
Quiero reiterar sin embargo, que mi columna expone al Sistema de Seguridad Social ecuatoriano (SSS) como similar -más no igual- a un esquema “Ponzi”, desde un punto de vista estrictamente financiero. No endilga actuación ilegal o inmoral alguna a los directivos o funcionarios del SSS, puesto que ellos apenas gestionan un sistema que está muy mal concebido desde hace décadas.
El hecho de que una mayoría de ecuatorianos haya ratificado en las urnas el SSS vigente, puede haberle otorgado “legitimidad política”, pero de ninguna manera cambia su realidad económica. El estudio al que hago referencia en mi columna -encargado por el propio IESS- muestra que las “inversiones” que detalla el señor Director en su oficio, de poco han servido para cerrar el creciente déficit actuarial que arrastra el SSS y que revela su verdadera naturaleza financiera.