Debo felicitar al Instituto Metropolitano de Patrimonio de Quito, a la oficina de la dirección de la coordinación de la construcción del proyecto Complejo Legislativo, en manos del arquitecto Carlos Lozada, al Cuerpo de Ingenieros del Ejército y a los arquitectos Juan Carlos Soria, Gabriela Aguilera y Ana Gabriela Salvador Irigoyen (autores del proyecto macro), por el resultado de este magno proyecto.
Señalo sí, que en el despliegue periodístico aparecido el día 23 de abril en este diario, redactado por Ana María Carvajal, se omitieron los nombres de los arquitectos Mauricio Salgado Vejarano y José Luis Sánchez Pazmiño, como autores del proyecto de rehabilitación de la villa Lasso, contratados como consultores para este fin, por el Instituto Metropolitano de Patrimonio, proyecto que se llevó a cabo a lo largo de más de un año en coordinación también con el arquitecto Carlos Lozada.