La Constitución de Montecristi no fue escrita en piedra, tiene que ser reformada las veces que sea necesario y cuando el país lo requiera, tratándose de una enmienda constitucional y siguiendo los trámites legales la facultad de reformar la Constitución lo tiene la Asamblea Nacional. La reelección indefinida es una opción valedera que la mayoría del pueblo lo ve con buenos ojos, las mismas encuestas lo demuestran con más del 75% de aceptación de la gestión presidencial y más del 55% de credibilidad del presidente Correa, luego de algo más de siete años de liderar al país, algo inédito en la democracia ecuatoriana. Los señores socialcristianos llevan más de 15 años gobernando el Municipio guayaquileño con su famoso “modelo exitoso” y nadie protesta, y ahora que el Ecuador se encuentra en pleno desarrollo en lo social, en salud, en educación, vialidad, turismo, con importantes inversiones en hidroeléctricas, refinerías y obras de desarrollo en varios sectores, acompañado de crecimiento económico, estabilidad económica, balanza comercial positiva, nos salen con que ¡la reelección es mala para la democracia! No señores no vamos a comernos ese cuento. De todas maneras con una posible nueva postulación del Eco. Correa nadie garantiza que vaya a ganar nuevamente la Presidencia, solamente el pueblo soberano sabrá tomar la mejor decisión en las urnas o si quiere seguir con el “modelo exitoso” del gobierno nacional o regresar al pasado.