Con todo el respeto que se merece el Presidente del Ecuador, quisiera llamarle a la reflexión, que es tan importante en todos los campos, sobre todo en un Jefe de Estado, y preguntarle si actúa con sabiduría. El rey Salomón, cuando Dios le preguntó qué deseaba tener para poder dirigir a su pueblo, contestó: “Señor, dame sabiduría”. “Erasmo de Rotterdam dice que sabiduría “no es otra cosa sino dejarse llevar por la razón”.
¿Es actuar con sabiduría dejar sin el pan de cada día de la noche a la mañana a 2 000 familias ecuatorianas, al quitarles sus trabajos en el IESS a pretexto de ahorrar 18 millones al año? ¿Es lógica la propaganda en la TV y radios diciendo lo mismo y lo mismo, gastando miles de dólares sin ninguna razón? Que yo sepa, el Ecuador no tiene una gran mayoría de tarados para que no entendamos lo que dice la primera vez.
¿Que el Ecuador ya es de todos? ¿De cuáles todos? Si así fuera estos 2 000 empleados serían reubicados, no botados a la calle pensando que aquí no pasó nada. Aquí sí pasó y pasó bastante, porque mañana al despertar estas familias no tendrán el dinero para comer, pagar luz, agua, pensiones, arriendo. ¿A cuál sabio se le ocurrió que esta era la solución? El asunto es que si el Ecuador es de todos hallen la solución, y pronto, no se crucen de brazos, actúen y reubiquen a estos empleados para que sientan que efectivamente el Ecuador sí es de todos.