Reflexión para Rodrigo Borja

Alguien me preguntaba el otro día si el Dr. Rodrigo Borja Cevallos vive en el Ecuador o no, la verdad no supe qué responder, ya que salvo los artículos que Borja escribe para este Diario y que se publican los domingos, de él no se sabe nada.

Y es que resulta incomprensible que alguien como él que creyó toda la vida en la democracia, en la justicia social, en la libertad y que sin duda aplicó dichos principios cuando ejerció la Primera Magistratura (1988-1992), ahora en un momento tan difícil para el país guarde un absoluto silencio que nadie se explica.

Es cierto que en 2004 decidió retirarse de la vida política a la que dedicó 50 años, pero yo entendía que el retiro implicaba no optar por candidatura alguna de elección popular nunca más, mas no desaparecer completamente de la vida pública y privar al país de sus consejos basados en la experiencia y sabiduría que se adquiere solo con el estudio y los años.

Sin duda alguna la gente extraña al Dr. Borja por su compromiso con la democracia y ahora que ella está en peligro en el país desde hace 6 años, los ecuatorianos requerimos de sus opiniones. Ojalá el Dr. Borja reflexione y piense en el Ecuador una vez más.

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