Los 600 mil manifestantes en las marchas de Quito, Guayaquil, Cuenca y Machala durante junio; las 488 mil personas que se expresaron en plantones y vigilias de oposición al régimen en todo el país durante julio; y las 100 mil personas que asistieron a la convocatoria indígena que llegó a Quito el 13 de agosto, dan cuenta de más de 1 millón 200 mil ecuatorianos que se han expresado en contra del gobierno del presidente Correa, cifra que corresponde al 16% de la población económicamente activa.
Cedatos segura que a finales de cada mes y durante estos tres meses, se sumaron 600 mil personas más a las concentraciones. Si esto se mantuviera constante, antes de que se acabe este año, la mitad del Ecuador disconforme con el correísmo, es decir el 47% de ecuatorianos según la misma encuestadora, estaría en las calles expresándose por el 82% de compatriotas que quieren ser consultados sobre la reelección presidencial indefinida.
Ese es el tiempo que le queda al régimen para rectificar.