En relación a la carta publicada el lunes 19 me permito opinar lo siguiente:
Si la pregunta nro. 8 inquiría sobre si se está o no de acuerdo en que se supriman los espectáculos que tengan como finalidad la muerte de un animal, al eliminarse el último tercio queda claro que el espectáculo taurino ya no tiene dicha finalidad, aunque en realidad nunca la tuvo; de haber sido así los camales y aún los planteles avícolas estarían llenos de “aficionados” durante las faenas propias de estos establecimientos.
El mismo Sr. Presidente, quien formuló la pregunta dijo en muchas intervenciones que las corridas de toros no se iban a acabar, que solamente se eliminaría la muerte del toro en la plaza y además decretó que los gallos de pelea no eran animales o solicitó que se “den suave” para que no mueran en un espectáculo que es público, es en ese momento cuando debían protestar.
En cuanto a que existen asuntos que demandan un conocimiento superior de los votantes, estoy de acuerdo, pero la campaña millonaria a favor del Sí nos dejó un espectáculo cercenado y 9 respuestas más, que solamente reflejan la influencia de esa campaña.