Estamos entrando en una temporada de promoción electoral en la cual, como nunca antes han proliferado los ciudadanos dedicados a la actividad política que buscan la reelección para mantener las canonjías de poder que ya experimentaron. Así mismo, se multiplicaron aquellos que al quedar sin partido de apoyo se afiliaron a otras tiendas a fin de no perder espacio en el quehacer político. ¿Será que le tomaron gusto al poder? ¿Será que no pueden dedicarse a otra actividad productiva?
Es hora de poner fin al oportunismo. En estas nuevas elecciones, votemos por personas con capacidad profesional, moral y ética, ya que no se puede continuar con autoridades ineptas, comprometidas con el enriquecimiento y poder ilícitos. Existen excepciones pero muy pocas. Que nuestro voto sea equilibrado y bien pensado para apoyar al desarrollo de nuestro querido Ecuador!