Tras piedras, palos

El domingo leí lo escrito por la articulista Grace Jaramillo titulado ‘Tras piedras, palos’ y aunque respeto su opinión me permito señalar las falacias para defender la pena del aborto:
1. “(…) se pone por delante fundamentos religiosos sobre en qué momento comienza la vida y se olvidan (…) de la madre”. ¿Y quién se acuerda del niño? ¿O es que acaso porque el niño por nacer no puede emitir un voto en favor de un determinado candidato, aún no puede ser considerado un ser humano?
2. “con su decisión están aupando el peor de los crímenes: el incesto”. ¿El peor de los crímenes? En caso de incesto se puede ayudar a la víctima, en caso de muerte ¿Cómo ayudo al muerto? ¿Cómo le devuelvo la vida?
3. “lo que significa llevar en el vientre a un ser producto de una violación” Pues por mi trabajo conozco muchísimas mujeres violadas o con hijo “no deseado” que, a pesar de todo, han sacado adelante un embarazo y son personas sanas y madres abnegadas que sus propias palabras, “no se imaginan la vida sin sus hijos”.
4. “Se impone el egoísmo de pensar que las obsesiones religiosas son más importantes que los seres humanos” ¿Qué? ¿Egoísmo, obsesión religiosa = defender la vida? ¿Es una obsesión religiosa el querer obedecer fervientemente el mandamiento de “No matarás”?, ¿por qué entonces se castiga a los asesinos?, ¿acaso el niño no es un ser humano?, ¿cuál será el criterio de la articulista para decidir si alguien es o no es un ser humano? Volví a revisar el diccionario de la RAL y el niño en el vientre de la madre también es un ser humano.
5. “penalizar la terminación de un embarazo ya es en sí mismo una aberración”. La Real Academia de la Lengua define aberración como “Acto o conducta depravados, perversos, o que se apartan de lo aceptado como lícito”. Según la articulista defender la vida antes de su nacimiento ya es un acto “ilícito”. ¿No será más bien el asesinato una de las conductas aberrantes que habría que desterrar de nuestro país y del mundo?
Quisiera pedirle a la articulista antes mencionada que antes de defender la despenalización del aborto vaya y vea de primera mano, no a través de videos o fotos, como queda el cuerpo de un niño después de un aborto. La invito a que vaya y le diga al cadáver del no-nato “yo estuve de acuerdo con la ley que te mató, porque consideré tu nacimiento como una aberración, porque la vida de tu madre era más importante que la tuya, porque consideré que era una aberración el mandamiento de “No matarás”

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