Siempre hay alguien que ayude

Estamos atravesando desde hace varios años situaciones conflictivas, dolorosas y duras que se extienden cada vez más, creando actitudes negativas personales, familiares y sociales que nos limitan a extremos que no conocíamos. En la sociedad moderna, por ejemplo, la depresión es uno de los males que afecta cada vez más a las personas. Producto del sistema de vida y el estrés diario, la mayor parte de la población es víctima de este mal. Las relaciones familiares han decaído dolorosamente. Ya no hay mayor contacto ni comunicación en las familias. ¿A qué se debe? En muchos casos a la educación, falta de unidad y valores que han desaparecido desde antaño. También a los nuevos accesorios que forman parte de la moderna tecnología. La sociedad atraviesa una falta absoluta de acercamiento y unidad: soledad, violencia, abuso femenino, desempleo, conceptos erróneos de lo que significa la política; en fin, infinidad de hechos que destruyen la convivencia humana.

Pero sí hay algunas organizaciones que ayudan y lo hacen con gran capacidad y afecto. El Teléfono Amigo, por ejemplo. 31 años de servicio a la gran comunidad por medio de voluntarios capacitados. Servicio diario durante los 365 días del año, más de 150 000 personas con cargas personales atendidas. Entrevistas por medios de comunicación, conferencias y charlas, cuerpo de psicólogos también voluntarios. Son cercanos y solidarios en todas las fronteras de la sociedad. Sí, siempre hay alguien que ayude.  

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