“Quien siembra vientos, cosecha tempestades” y “La violencia genera violencia”. Son dichos que reflejan la sabiduría de los pueblos. Lo que nos está pasando es la consecuencia directa de estos comportamientos. Que un Alcalde irrespete al Presidente y le mande públicamente al carajo (fueron sus textuales palabras) no es concebible en ningún país civilizado, sino por la actitud intolerante, prepotente y desafiante que caracteriza a este Gobierno de turno y al movimiento AP. No puede haber diálogo genuino excluyendo a la otra mitad del país que tiene ideas diferentes. Podría darse que ellos sí piensen y tengan buenas propuestas para aportar al país. De eso mismo se trata, cuando se sabe gobernar en una democracia auténtica y pluralista. Recomiendo cambiar de lecturas a los de AP; en lugar de las biografías de Fidel, Stalin o Hitler, deberían darse un baño de madurez y tolerancia con vidas ejemplares de ‘Los pocos sabios que en la vida han sido’: personajes políticos de la talla de Mahatma Gandhi, Martin Luther King o Nelson Mandela.