En Riobamba estamos viviendo anticipadamente un ambiente preelectoral con la presencia de ciudadanos convertidos en salvadores del pueblo, pero usando argumentos nada originales ni iniciativas propias, para buscar protagonismo y alcanzar la voluntad de una ciudad que merece mejor suerte.
De entre los escombros han aparecido ciudadanos que tuvieron su oportunidad como diputados, alcaldes, concejales, excandidatos que no recibieron el voto popular e inclusive autoridades en funciones que no han demostrado trabajo, propuestas ni mucho menos gestión en beneficio de Riobamba y la provincia.
Los vemos en los medios de comunicación social, justo en un año electoral, esperando obtener algún rédito personal, utilizando como plataforma política cuestiones que nunca tuvieron el interés ni la preocupación oportuna de estos personajes que ahora aparecen como los redentores de esta noble tierra puruhá.
Inclusive algunos, autodenominados candidatos, actúan prevalidos del poder económico y político que ostentan, dueños de agrupaciones partidistas, donde imponen su voluntad, sin importarles lo que piensen militantes y simpatizantes.