El sueño de los manabitas ha sido siempre tener un presidente oriundo de Manabí, pero tristemente nuestros líderes no tienen fuerza electoral fuera de la provincia y hoy por hoy solo tendríamos la oportunidad de que algún candidato a la presidencia nombre a un manabita como su vicepresidente. Por ahora Guillermo Lasso ya dijo que su binomio será quiteño, mientras tanto se oyen nombres de precandidatos en Manabí, unos conocidos por haber ocupados cargos públicos y otros desconocidos en el ámbito político, pero que han contribuido al desarrollo de Manabí. Hay que ser realistas, nunca hemos tenido representantes, tanto en el Congreso o Asamblea o en ministerios que hayan tenido un verdadero papel de defensores y hacedores de leyes a nuestro favor. ¿Será que toda la culpa no la tiene el gobierno cuando nos ofrece mega-proyectos que quedan en nada debido a la impasividad y quemeimportismo de nuestros asambleístas? El gobierno subestimó la capacidad de los alcaldes y prefecto cuando nombro el comité de reconstrucción dirigido por Glas y por que no protestaron nuestros dirigentes?.Seguiremos soñando con tener un Presidente manabita que se parezca o no a Eloy Alfaro?. Este es el tiempo donde “se mueven las frutas”y muchos tratan de figurar en la contienda electoral, pero que se pongan la mano en el pecho y se pregunten sin son capaces de llegar a la Presidencia sin una mancha o desliz!