Negociaciones con honduras

No está mal que Ecuador intente suscribir un acuerdo de preferencias arancelarias con Honduras, puesto que al menos ya es una señal del Gobierno, de querer mejorar una inserción que viene muerta en los últimos años en los que solamente se actualizó el Acuerdo Comercial con Chile en el 2008 y se suscribió un acuerdo muy reducido con Guatemala, vigente desde febrero del 2013.

Respecto al posible acuerdo comercial con Honduras, lo ideal hubiese sido suscribir uno solo con los cinco países que forman parte del Mercado Común Centroamericano, rectificando en parte la inconveniente decisión adoptada en el 2010 cuando Ecuador y los países del MCCA desistimos conformar lo que hoy es la Alianza del Pacífico. Independientemente de lo señalado, según cifras oficiales de Honduras, en los tres últimos años importaron del mundo un valor que no llegó en ningún caso a los 9 000 millones de dólares, valor en el que las cifras de importación desde Ecuador son ínfimas; en el 2012, fueron apenas 14 millones de dólares y en el 2014, alcanzaron los 23 millones de dólares, sin contar el petróleo, lo que representan casi nada frente a los 12 716 millones de dólares exportados por Ecuador al mundo en el 2014, sin considerar el petróleo. Igualmente, las cifras oficiales de Honduras indican que apenas 5 productos manufacturados registran importaciones desde Ecuador, por un valor superior al millón de dólares. Obviamente, el Acuerdo Preferencial de Comercio que se propone suscribir con Honduras intentará mejorar estas cifras a través del estímulo que se dará a dicho comercio en función de las preferencias que se negocien. Sin embargo, por las condiciones mismas de la estructura productiva y comercial de los dos países, el ámbito de productos objeto de negociación será reducido. Un antecedente de ello es lo sucedido con Guatemala, país con el cual, de un ámbito universal de bienes comprendidos en aproximadamente 7 461 partidas arancelarias, apenas se negociaron productos comprendidos en 700 partidas que representan el 10% del universo total de bienes. Finalmente, esperemos que la negociación en esta oportunidad no pase por equivocaciones elementales que la trunquen y no suceda con Honduras lo mismo que aconteció con El Salvador y, sobre todo, que esta negociación sea el inicio de una nueva política de inserción y la señal de que en los próximos años Ecuador va a negociar acuerdos de Libre Comercio con los países con los cuales nuestros vecinos, Colombia y Perú, ya los tienen suscritos y en plena vigencia.  

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