Es notorio que los ecuatorianos en los últimos años por razones que nos molestaron por decisiones políticas provenientes del más alto nivel nos dividimos, distanciamos y hasta enemistamos, incluso hasta entre familias, buenas amistades, etc. Se creó un ambiente de miedo e irrespeto que no colaboró para el bienestar social y psicológico.
Acertadamente el Presidente Moreno (por quien no voté) dándose cuenta de esto y del daño que significa para una nación ha llamado a un diálogo con todos los sectores que no pueden pensar igual pero que estamos “empujando” por una mejor sociedad con respeto, derechos y deberes de todos; esto ha sido bien aceptado por la mayoría de ecuatorianos. Si en Colombia las víctimas de la guerrilla perdonaron a sus victimarios, ¿por qué nosotros deberíamos seguir (de acuerdo al criterio de algunas gentes “resentidas”) en conflicto? Como un ciudadano que cumple con las leyes, padre de familia y amante de la paz, apoyo y me uno a millones de ecuatorianos al Diálogo y tranquilidad que está ofreciendo el Presidente Moreno.