En relación al editorial publicado por Diario EL COMERCIO el 28 de diciembre del 2011, bajo el título: ‘A contravía de la historia’, en el cual se realizan afirmaciones inexactas, que distorsionan la realidad de la política exterior que se encuentra implementando el Gobierno, y crea en el lector una opinión equivocada con respecto al tratamiento que se otorga a temas sensibles como el comercio y la cooperación, la Dirección de Comunicación de la Cancillería considera necesario realizar aclaraciones.
Las contradicciones en que incurre dicho editorial, al demandar apertura comercial y el establecimiento de nuevos mercados para nuestros productos y, al mismo tiempo, afirmar que el acercamiento al Mercosur inundaría de productos el país, señalando además las supuestas deficiencias del mercado cubano para la promoción comercial del Ecuador, revelan una clara intención política enfocada no solo en desacreditar las decisiones que viene adoptando el país en este ámbito, sino que además prejuzga sobre el verdadero significado y dimensión de dichos vínculos comerciales. Por estas mismas razones, sostener que las giras realizadas por el Canciller a distintos países de Europa y Asia carecen de resultados concretos es faltar a la verdad y demuestra una vez más las incongruencias y mala fe con las cuales se exponen estas falsas apreciaciones.
Las relaciones exteriores se construyen a partir de frecuentes contactos políticos y diplomáticos que son los que preparan el camino para desarrollar el comercio y la cooperación, así como lograr la inserción justa y equilibrada del país en la economía mundial, de manera que de ello se deriven los efectos positivos que se han obtenido hasta ahora gracias a una acertada gestión internacional en todos los ámbitos de la política exterior. Solo quienes, por su propia conveniencia, se resisten a reconocer estos hechos, adoptan la posición, siempre censurable, de negar la verdad.