Una multitud recibió al presidente Ahmadinejad en la Plaza Grande. Una multitud cuya mitad, las mujeres, en el país del señor Ahmadinejad serían obligadas a vestirse según leyes religiosas. Una multitud en que una parte sería condenada a muerte por apostasía (p. ej. Salman Rushdie). Una multitud donde algunos serían castigados a morir por amar a otra persona fuera del matrimonio (p. ej. Sakineh Mohammadi Ashtiani). Una multitud donde una parte sería ejecutada públicamente por el delito de tener una inclinación sexual diferente. Una multitud que necesita ver el video de la muerte de Neda Agha-Soltan. Multitud que necesita entender que la libertad que gozamos los ecuatorianos en otros países, no pueden soñarla. Una libertad por la cual puedo escribir estas líneas sin temor a que me dañen (p. ej. Zahra Kazemi). Una multitud recibió ignorante las emociones pasajeras, insensibles a los riesgos del futuro.