Juicio a Ma. Fernanda Espinosa

Son inadmisibles dos cosas: la una, el desparpajo y prepotencia de la Sra. Fernanda Espinosa de cómo actuó en cuanto tuvo intereses personales jugando y menospreciando los valores del país que representó; y la otra, lo incomprensible del presidente Moreno que permitió, pese a que manifestó no estar de acuerdo pero respetar, la extensión de la ciudadanía a Assange.

La Asamblea, en aras de la justicia, debe proceder al juicio político a la ex canciller, por tomarse atribuciones que no le correspondían bajo ningún argumento y por vanidad e interés personal, seguramente, extendió la ciudadanía ecuatoriana a un perseguido de la justicia que ha vivido gozando de protección y comodidad por más de 6 años en nuestra embajada en Londres que nos ha costado millones de dólares; además, cometió la barbaridad imperdonable de nombrarlo Miembro de la Misión Diplomática para luego pedir el status diplomático al Reino Unido y que jamás fuera aceptado por principio y lógica. Lo más sagrado que tenemos los ecuatorianos es nuestra identidad y al haberla utilizado para fines oscuros y reprochables hoy tenemos un ecuatoriano ilustre desconocido como parte de la diplomacia. ¡Qué tal, conciudadanos, cómo se ha jugado con nuestro respeto y orgullo! Es hora de fijar la visión y norte que queremos y necesitamos como Ecuador. Espero que el nombramiento de un caballero de carrera como Canciller sea el comienzo de un cambio radical indispensable. 

Suplementos digitales