Jaques Judiciales

Es indignante pensar que nuestros garantes de justicia generan prácticas ilegítimas dentro de nuestras cortes ecuatorianas. La cantidad de poder que su puesto otorga para muchos es una puerta a la corrupción, lo cual genera que los jueces acepten pagos para el cambio de sentencias y cambien de opinión frente a amenazas de los actores del caso; lo más penoso es que esto aumenta día a día. Me parece absurda la prepotencia y ambición de nuestros jueces, y que cantidades de dinero sean las que generen injusticia frente a las víctimas de delitos. Como no pensar que a la hora de uno ser vulnerado por un tercero y tengamos que recurrir a la justicia nuestro proceso pueda ser tergiversado. Por lo tanto, me pregunto ¿qué clase de justicia estamos propiciando?

A nuestra sociedad infelizmente poco le afecta o poco le interesa a menos que se convierta en un escándalo político del que todo el Ecuador se encuentre hablando; sin embargo, es una realidad que nuestro sistema de justicia enfrenta. Sobre muchos delitos de corrupción nadie tiene idea que han sido cometidos, pude que sean pocos, pero es inaceptable que se rompa con la ética y la seguridad jurídica. Los actos de criminales no deberían ser protegidos con dólares que a muchos les deja ciegos.

Que la sociedad acepte sus errores, no lancen la piedra y escondan la mano, que después no tendrán el derecho de criticar ni a su sombra. Tengan conciencia del daño, es una violación a la justicia, a aquella que los representa y los defiende. Si son inocentes entonces no tienen porque comprarla. Y para los señores jueces corruptos: cierren las manos y abran los ojos, la vida de la gente se encuentra en sus manos, los respetamos, garanticen nuestra justicia y sean fieles a su título.

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