Diario EL COMERCIO publicó el 25 de julio el artículo de opinión “Lanzar dados al pasado” del señor Pablo Cuvi, en cuyo contenido realiza un breve pero interesante repaso a dos procesos electorales en 1960 y 1996 en los cuales los inesperados desenlaces del período presidencial de los ganadores marcaron momentos históricos negativos para la democracia y para el país. Este repaso llega hasta los tiempos actuales en los que estamos ad-portas de una nueva elección presidencial que será clave en el futuro. Para este interesante ejercicio, el destacado articulista utiliza el denominado análisis contra fáctico, herramienta del conocimiento que a su vez se aplica para la generación de “escenarios contra fácticos”.
Lo que pudo haber sido y no fue o en lo que fue, pero pudo haber sido dentro de la crónica reciente de nuestro país. Cuántos hechos históricos contemporáneos pudieran interpretarse o reinterpretarse aplicando el “…que hubiera pasado si…”
Seguramente (en el campo de la especulación) no hubiera existido el período dictatorial civil y militar de los años setenta ni el festín del petróleo; probablemente el Arq. Sixto Durán-Ballén no hubiera proclamado su histórico “ni un paso atrás” en 1981; probablemente el Dr. Osvaldo Hurtado no hubiera sido presidente y en los años ochenta en un probable gobierno del Dr. Rodrigo Borja no hubiera existido la subversión. Tal vez no estaríamos dolarizados y no hubiera existido un golpe de Estado que en años posteriores llevó al poder a un militar que no murió en el intento y dejó la presidencia en manos de su vicepresidente, en cuyo período se inició el germen del nefasto correato.