Quisiera este momento escuchar la voz del señor Douglas Argüello cuando casi al punto del clímax dice que han pasado tantas horas y el periódico Hoy no rectifica no sé qué cosa. Y quisiera esa voz hablándole al oído al Alcalde de la ciudad grande, diciéndole que han pasado 53 días desde que EL COMERCIO tuvo la amabilidad de publicar una carta mía en la que pedía se tapen las zanjas que en gran número existen en el circuito para bicicletas y peatones en el parque de La Carolina y hasta ahora, nada. Incompetencia total, absoluta. Días después de mi carta, alguien escribía en la misma sección y decía que debido a una de esas zanjas, su hijo sufrió una aparatosa caída que tuvo como resultado inclusive una cirugía en su rostro. Aun con ese penoso hecho, nada. Incompetencia total, absoluta y además irresponsabilidad. ¿De quién? ¿Del Alcalde de ciudad grande? ¿Del administrador del parque de la ciudad grande? ¿Del que se cae en la zanja?
Por otro lado, en el mismo parque, los martes de cada semana, encuentro al personal del servicio de seguridad presidencial. De los 100 o más que van, 15 o más entran en moto al parque La Carolina y las parquean bien ordenaditas. Después de hacer su calentamiento, trotan en el circuito de las zanjas, utilizando todo el espacio disponible, es decir como si fueran en la caravana presidencial. Yo que ruedo en mi bici tengo que pedir que troten utilizando solo su carril derecho, pero hasta me insultaron por semejante atrevimiento.